lunes, febrero 13

Papá y mamá

Mi padre ronca con suavidad,
como si rasgara una sábana vieja
esperando no hacer ruido;
mi madre está recostada
con los lentes puestos, desajustados,
la TV encendida en una serie de Netflix.
Los oigo desde la habitación contigua,
me parece que simulan dormir.
Ya no quiero contar esto.
No porque sea una imagen trivial
que bien podría no existir.
No porque no desee simplemente
escribir con cualquier pretexto. 
Estar vivos nos lleva a este punto:
echamos de menos cada segundo
que nos va abandonando.